Los platos preparados están al alcance de todos los bolsillos. Se pueden adquirir a un precio razonable, gracias a los procesos sistematizados de elaboración, lo que permite un mayor ahorro económico para el consumidor.
Los platos preparados son la solución perfecta para quienes no disponen del tiempo suficiente para dedicárselo a la cocina, para quienes cuentan con poca práctica culinaria, o simplemente, para quienes prefieren disfrutar más de sus ratos de ocio.
Son fáciles de preparar y de servir, ya que llegan al consumidor casi listos para comer. Y es que para la elaboración de muchos de estos productos, tan solo se requieren unos minutos en la cocina.